La sugerencia emitida por el presidente Donald Trump, acerca de posponer los Juegos Olímpicos 2020 por un año ante la pandemia de coronavirus, fue descartada de inmediato por la ministra japonesa a cargo de la organización de ese evento deportivo.
“Ni el COI ni el comité organizador contemplan la cancelación o posposición. Absolutamente no”, dice Seiko Hashimoto, medallista olímpica de bronce, durante una conferencia de prensa ofrecida en Tokio.
Cabe mencionar que el COI (Comité Olímpico Internacional) y los organizadores de Tokio 2020 han mantenido la misma postura desde hace tres meses, cuando surgió el brote del nuevo virus en China. El padecimiento se propagó después en Asia y luego a todo el mundo.
Y el mensaje insistente ha sido: Los Juegos Olímpicos se inaugurarán el 24 de julio, como está previsto.
“Lo mejor que podemos hacer, a fin de que los atletas no enfrenten confusiones o incertidumbre, es poner nuestro máximo esfuerzo”, dijo Hashimoto, quien compitió en cuatro Juegos Olímpicos de Invierno dentro del patinaje de velocidad. Obtuvo el bronce en 1992 y participó en tres ediciones olímpicas de verano como ciclista.
Una cancelación o posposición tendría innumerables consecuencias, que afectarían a los patrocinadores, la televisión, 11 mil deportistas olímpicos, 4.400 paralímpicos, los empleados, las aerolíneas y los hoteles. Implicaría una pérdida de 1.000 millones de dólares en entradas vendidas ya para las distintas competiciones.
Y afectaría a 80 mil voluntarios, quienes se perderían una oportunidad única en la vida para ayudar en la organización de los Juegos.