Tras las protestas que estallaron en Estados Unidos por la muerte de George Floyd, un hombre negro que pereció asfixiado por un policía blanco, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU se pronunció en contra del racismo en ese país.
Ante ello, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, tildó de hipocresía una condena al racismo declarada por la ONU y dijo que que el consejo debería centrarse en lo que llamó disparidades raciales sistémicas en países como Cuba y China.
En su declaración de este sábado, titulada “Sobre la hipocresía del Consejo de Derechos Humanos de la ONU”, Pompeo dijo que la discusión en los Estados Unidos sobre la raza después de la muerte de Floyd “es un signo de fortaleza y madurez de nuestra democracia”.
“Si el Consejo se tomara en serio la protección de los derechos humanos, hay muchas necesidad legítimas de su atención como las disparidades raciales sistémicas en lugares como Cuba, China e Irán”, dijo el jefe de la diplomacia de la primera potencia mundial.