Autoridades municipales y estatales avalaron la instalación de una feria para venta de cohetes en la carretera 57 dentro de la Quinta Isabel, en el municipio de Arteaga, donde al menos ocho puestos venden toneladas de pólvora y fuegos artificiales, pues los locatarios cuentan con el permiso extraordinario para la compra y venta de pirotecnia, expedido por la Dirección General de Armas de Fuego y Control de Explosivos de la Sedena.
Sin embargo, olvidaron revisar las medidas de seguridad. Zócalo identificó que los extintores que rodean dichos locales como medida de seguridad-prevención y protección contra incendios están caducos o serán inservibles al utilizarlos, pues recibieron mantenimiento hace más de un año.
El capitán Sergio Velázquez Dávila, de la Estación de Bomberos Norte, explicó que la aguja del manómetro, aparato de los extintores que indica la presión del gas presurizado, deberá indicar la zona verde si la presión es la correcta, mientras que la aguja de dichos extintores marca la zona roja y revelan que están bajos de presión.
Añadió que los extintores sufren un desgaste con el paso del tiempo y pierden efectividad, por lo que es necesario darles mantenimiento al menos cada cinco meses, mientras que los extintores colocados en la Feria del Cohete tienen señalado el último mantenimiento en noviembre del 2016 en la etiqueta.
Aun cuando se encuentra lejos de instalaciones eléctricas, de gas y viviendas, tal como marca la ley, un solo cohete es suficiente para causar un incendio, que sería imposible de sofocar porque los extintores están solamente como adornos en la feria, donde laboran más de una docena de jóvenes y asisten cientos de coahuilenses.