El presidente estadounidense, Donald Trump, firmó este miércoles una emergencia nacional que prohíbe a las compañías del país usar equipos de telecomunicaciones fabricados por empresas que supuestamente intentan espiar a Estados Unidos, lo que podría impedir hacer negocios con empresas como la china Huawei.
La orden ejecutiva no se dirige contra ningún país específico, pero se produce en plena tensión comercial entre Washington y Pekín.
La orden autoriza al Departamento de Comercio a bloquear los negocios relacionados con tecnologías desarrolladas por un “adversario extranjero” que puedan poner en peligro la seguridad de EEUU mediante el espionaje o el sabotaje de los servicios necesarios para el funcionamiento del país.
La orden ejecutiva no bloquea inmediatamente la compra del equipo de telecomunicaciones de ninguna compañía, pero da al secretario de Comercio, Wilbur Ross, 150 días para desarrollar un plan sobre cómo implementar la medida de Trump y establecer las prohibiciones, detallaron a la prensa funcionarios estadounidenses.
En un comunicado, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, consideró que la decisión de Trump trata de “proteger los servicios y tecnología de información y comunicación” de EEUU.
EEUU lidera una campaña global para impedir que las compañías chinas, como Huawei, se hagan con el control de las redes 5G, que permiten navegar por Internet con mucha más velocidad y podrían facilitar el desarrollo de vehículos autónomos y técnicas para hacer cirugía por control remoto.
Huawei ha conseguido situarse a la cabeza del desarrollo de la tecnología 5G, algo que Washington ve con preocupación porque teme que Pekín aproveche esos sistemas para el espionaje.