Como consecuencia de la psicosis que se ha generado por la pandemia del nuevo coronavirus, pobladores de una comunidad indígena del estado de Chiapas vandalizaron este jueves la alcaldía y un hospital para protestar por las fumigaciones contra el dengue pues sospechan son usadas para envenenarlos.
Tras los acontecimientos, la alcaldía de Villa las Rosas emitió un comunicado en el que señala que estos disturbios fueron orquestados por “falsos líderes” que buscan “desestabilizar” a esta comunidad de unos 28.000 habitantes, en su mayoría indígenas.
Esta es la segunda rebelión que encabezan indígenas de Chiapas luego de que en la comunidad de Venustiano Carranza también fueran atacados edificios públicos el 28 de mayo en medio de falsas versiones en redes sociales que niegan la existencia del nuevo coronavirus o denuncias de que las autoridades pretenden esparcir la enfermedad en fumigaciones contra el dengue.
“Los fumigadores vienen contaminando (…). Estuvieron fumigando en la noche, estaban rociando líquido para matar a la gente”, expresó uno de los campesino de Villa las Rosas al ser interrogado sobre los motivos de la protesta.
Este campesino, que por seguridad pidió el anonimato, dijo que en su comunidad no creen en la existencia de la covid-19, pero acusó a médicos y autoridades de envenenar y no dar la debida atención médica a pobladores. “Llegan con un pequeño dolor de cabeza y ya lo sacan muerto en diez, veinte minutos”, reclamó.
La prohibición de que un campesino que murió por covid-19 fuera velado, fue lo que desató el enojo de sus familiares y vecinos, que salieron a protestar a las calles, en el que intentaron quemar la alcaldía, vandalizaron el hospital comunitario, golpearon el director del mismo y prendieron fuego a una ambulancia.