Luego del derrame registrado en la presa de jales de una mina en la localidad de San José de Los Manzanos, en el municipio de Canelas, Durango, la Conagua alertó de una posible contaminación a las comunidades que toman agua de pozos ubicados en las márgenes del río Humaya, aguas arriba de la presa López Mateos.
La dependencia dio a conocer que se ordenó la vigilancia permanente y monitoreo del escurrimiento que llega al vaso de la presa. Con el apoyo del Gobierno de Durango, su personal realizó una visita de inspección a instalaciones de la empresa Exportaciones de Minerales de Topia (EMITSA), que el 1 de mayo registró un derrame en una presa de jales.
Tras una revisión del área, la Conagua hizo saber a la empresa que “deberá presentar de inmediato un programa de acciones para realizar las medidas de urgente aplicación, que consisten en la rehabilitación de la parte colapsada de la presa que garantice la operación segura del depósito de jales, así como recolectar los jales depositados en ambas márgenes y realizar su caracterización para determinar su clasificación en materia de residuos peligrosos”, indicó en un comunicado de prensa.
Por su parte, la empresa informó que, una vez que notificó a la Conagua y a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), puso en marcha medidas de remediación y control para la restauración del bordo que se rompió en la presa de jales.