Fuentes de la Procuraduría General de Justicia confirmaron que durante la madrugada del miércoles, en un operativo implementado por elementos de dicha corporación, tras la denuncia de una mujer de que su familia se encontraba secuestrada, se procedió a una redada en donde se logró el arresto de dos responsables de dicho delito, quienes resultaron ser efectivos del grupo especial de Fuerza Coahuila.
Aunque la PGJE ha mantenido un hermetismo en el caso, trascendió que familiares de los que mantenían cautivos ya habían pagado una parte del rescate exigido, que era de alrededor de 70 mil pesos, pero ante la insistencia se decidieron a denunciar el caso ante las autoridades de procuración quienes realizaron un operativo de captura.
Tras la detención de los dos policías de Fuerza Coahuila, estos fueron internados en el Cereso de Piedras Negras.
Las víctimas son de origen centroamericano, según confirmó la fuente, quienes fueron puestas a resguardo y con protección en lo que se judicializa el caso para llevar a estos sujetos ante un Juez para enfrentar los cargos que se determinen como secuestro y extorsión en principio.
Los dos presuntos secuestradores y extorsionadores quedaron internados en el Cereso ubicado en el kilómetro 10.5 de la carretera Ribereña.
