Joaquín el Chapo Guzmán, narcotraficante procesado en ese país, goza de buena salud y hasta está aprendiendo inglés en la celda donde cumple prisión en Nueva York, aseguraron autoridades de Estados Unidos.
La defensa del mexicano presentó un oficio semanas atrás ante la justicia para que las condiciones en las que cumple su carcelería mejoren. Aseguraron que padece de fuertes dolores de cabeza y tiene alucinaciones auditivas.
Las autoridades han hecho inspecciones días después y Guzmán ha recibido la visita de un psicólogo que confirmó que no eran alucinaciones auditivas sino que se trataba de sonidos de la radio de uno de los guardias de la cárcel.
Al menos 30 personas lo han visitado y tiene a la semana 21 horas de reuniones con sus abogados y asistentes legales. Negaron el aislamiento que había acusado los abogados del narco.
