Samsung sabe que sus portátiles más recientes no lograron el impacto que hubiera querido, así que para su nuevo lote de ordenadores está probando algo nuevo: tomar prestada la tecnología QLED que utiliza en sus televisores de gama alta e implementarla en las pantallas de los portátiles Galaxy Book Flex y Galaxy Book Ion.
Samsung afirma que es la primera vez que una compañía usa tecnología QLED en un ordenador portátil. Con sus nuevas pantallas, los portátiles de Samsung alcanzan un brillo máximo de hasta 600 nits (cuando la mayoría de ordenadores portátiles alcanza un máximo de 300 o 350 nits).
En comparación con un Samsung Notebook 9 del año pasado, la pantalla del Galaxy Book Flex es notablemente más brillante y vibrante. Sin embargo, para obtener los 600 nits de brillo en el Galaxy Book Flex, tienes que habilitar un modo especial para exteriores.
Con un magnífico acabado azul, un chasis de aluminio y una bisagra de 360 grados, el Galaxy Book Flex es el 2 en 1 más premium de Samsung. Viene con una gama de procesadores Intel Ice Lake de décima generación, hasta 16 GB de RAM y SSD NVMe de hasta 1TB.
Pero las pantallas QLED no son la única pieza de tecnología que Samsung tomó prestada de otros dispositivos: el Galaxy Book Flex viene acompañado de un lápiz óptico S Pen como el de los teléfonos Galaxy Note. Tanto el Galaxy Book Flex como el Ion vienen con algunos extras relacionados con los smartphones, como un sensor de huellas para iniciar sesión y una base de carga inalámbrica ubicada bajo el touchpad.
Desafortunadamente, pasará mucho tiempo hasta que los nuevos portátiles de Samsung lleguen al mercado. Samsung dice que el Galaxy Book Flex y el Galaxy Book Ion estarán disponibles en algún momento de la primera mitad de 2020.